Hace tiempo que había oido hablar de esta vía ferrata, incluso ha salido en la tele en algún programa. Tiene fama de dura, pero en particular lo que más me llamaba la atención es un puente tibetano de unos 65 metros. Tenía ganas de ir a hacerla. Como está cerquita de Barcelona, en Centelles, y ayer el día lo pintaban algo nublado y tal, decidimos acercarnos.
Lara y yo nisiquiera tenemos disipadores para vias ferratas, por lo que fuimos con unas cintas improvisadas. Lo que si es importantísimo en esta ferrata es llevar guantes. Nosotros llevamos unos de esos de albañil de cuero, 5 o 6 euros, tuneados por nosotros mismos. Van de fábula.
La vía está excelentemente equipada, tiene varios puntos donde puedes abandonar, y algún tramo tiene opción dura y opción más asequible, todo esto indicado con señales.
Yo creo que tuvimos suerte y no había excesiva gente. En el puente teníamos a cuatro o cinco personas delante. Esto es importante porque por el puente solo puede pasar una persona a la vez, la zona justo anterior al puente es bastante reducida, y dependiendo de lo que tarde cada persona, quizá entre 5 y 10 minutos, pues calcula...
En general, muy chula, el puente realmente impresiona. Al menos a mi me impresionó bastante, y mira que estoy acostumbrado a escalar e incluso en su día hice parapente. Molaría haberlo pasado con una Go Pro y narrarlo!
Os dejo unas fotitos para que os hagais una idea de las diferentes secciones de esta gran ferrata.