20 dic 2013

Por Andalucía con la Beluga

De este viaje solo explicaré que nos juntamos cuatro amigos con ganas de escalar, ver nuevos sitios y, por qué no decirlo, dejar un poquito de lado las tradicionales Navidades.

Yo me lo pasé genial, y se lo tengo que agradecer a Caia, Lili y Gigi, que son las tres unas chicas fenomenales, y a un buen puñado de gente que fuí conociendo durante nuestro vagabundeo, con mención especial a Pablo y su familia.

Podeis ver detalles de la ruta que seguimos en el blog de Chilicampers.

Aquí simplemente incluyo las mismas fotos, y algunas extra que me hacen especial gracia.





















13 dic 2013

Aresta Brucs a La Bitlla

Gigi - ¿Así que este viernes lo tienes libre?
Fili - Yup!
Gigi - Yo también! Podríamos hacer algo...
Fili - ¿Te apetece hacer una vía de largos, pero en algún sitio donde puedas experimentar la sensación de 'hacer cumbre'?
Gigi - umh... piensa que hace apenas un mes que he empezado a escalar y solo he hecho deportiva... pero si es facilita... :-D
Fili - ¡Guay! Sí, claro, facilita!



La Aresta Brucs a la Bitlla (60m, IV+), en la región de Agulles de Montserrat fue la elegida. Fácil desde el punto de vista técnico, pero con unos alejes importantes, especialmente en el segundo largo, y es que los aperturistas en el año 44 eran muy valientes. La vía sólo tiene cuatro seguros.

Ir a la montaña cuando la mayoría de la gente que ves en coche va a trabajar da una sensación especial. Durante la aproximación a la Bitlla no vimos absolutamente a nadie. Bueno, sí, desde una de las agujas por encima del refugio Vicenç Barbé nos observaba una cabra!

Las cabras en Montserrat son caras de ver, sin embargo quizá ésta sabía que era la primera vez que Gigi se adentraba en la región de Agulles y quería causarle buena impresión.

Nos pasamos el sendero que sube a la Bitlla desde la canal de les Bessones, pero la intuición nos dijo que teníamos que retroceder, y únicamente perdimos unos minutos antes de llegar al inicio de la Aresta Brucs.

El día era espléndido, un regalo poder escalar en Montserrat en Diciembre. Tras explicarle un poquito a Gigi como funciona el reverso, las maniobras que iríamos haciendo, y como nos comunicaríamos, me lancé a por el primer largo. Aunque había leído que la exposición de la vía es alta, y que se podían colocar no se qué cosas (nunca he entendido cuando la gente menciona camalots, semáforo de aliens, etc,) yo no pillé ni mis fisureros ni los friends, que sin duda en este primer largo habría usado. Pero bueno, curtida de coco y para arriba!

Gigi subió estupendamente. La primera reunión ya coge un ambiente fantástico, y con alguna duda tras mirar la reseña del segundo largo y ver que el primer seguro estaba muy arriba, salí a buscarlo. Aquí es donde Gigi luego confesó haber sufrido un poco, ya que hasta que no llegué a un clavo que tranquilamente está a diez o quince metros de la reunión, una caida hubiera sido un auténtico marrón!

Aunque no llevaba más que cintas, tampoco vi ningún sitio donde haber colocado nada, por lo que este trozo requiere saber disfrutar de la exposición, en roca excelente, y apreciar lo audaces que fueron nuestros antepasados.

Después del clavo hay un murito más vertical, fácil, y un spit, para luego llegar a una reunión que, aunque no se si es la original de la vía, es de lo más auténtica.

Desde aquí es posible ir a la derecha a cazar una instalación para rapelar, pero como nosotros teníamos ganas de comernos unos cacahuetes fritos con miel en la cumbre, hicimos la trepada final.

En la cima, presidida por la más alta Bola de la Partió, estuvimos un buen rato, y cuando nos cansamos de hacer fotos y charlar, me fuí a montar el rápel.

Gigi había rapelado, pero hacía muchísimo tiempo, nunca se había quedado sola en una instalación de estas características, y no había usado el machard, así que volvimos a hacer una sesión de how to... y me fuí para abajo. Siempre te queda un puntito de preocupación cuando dejas a alguien con poca experiencia ahí arriba, pero valió la pena cuando al llegar abajo Gigi dijo que le había encantado y había estado muy tranquila, y es que es un rápel, entre la Bitlla y la Bola de la Partió, muy guapo y con mucho ambiente.

De vuelta estuvimos jugando al escondite con una cabra, quizá la misma que vimos a primera hora y que se quería despedir. Después de dos intentos a tirarle una foto, irse al bosque, ir yo a buscarla, y ella volver a subirse a un risco, me dejó hacerle la foto que veis al final.

No se si Gigi querrá hacer alguna vía larga más. Quizá el tema de la exposición le tire atrás, pero estoy seguro de que no le defraudó lo bonito de la ascensión en un lugar tan mágico como Agulles, con cabras montesas prácticamente como única compañia.

Felicidades Gigi, ya eres montserratina!

1 nov 2013

Oto, La Foradada del Toscar y Fiscal

No dudé ni una milésima en aceptar la invitación de Roger a pasar el fin de semana en la casa que tiene su familia en Fiscal, con el objetivo de descubrir nuevas zonas de escalada.

Roger todavía no puede escalar debido a una fractura de calcáneo, pero la lesión progresa adecuadamente y ya se puede acercar a los pies de via. Gran mérito tiene el ir a una zona de escalada y no poder encordarte, pero tenemos un sin fin de planes para cuando pueda.

Su hermana Gigi, que prácticamente empieza ahora a trepar, sería la que me tendría que aguantar durante casi tres días. Pobrecilla!

El viaje desde Barcelona no tuvo desperdicio. Íbamos Gigi, Roger, sus padres, su perrita Uma y yo en la Ferbotten, una preciosa Volkswagen T3 de los 70. Incluso nos paró la Guardia Civil, afortunadamente sin consecuencias.


La tarde nada más llegar la aprovechamos yendo a Oto, donde hay un pequeño paño de roca arenisca con unos estratos de lo mas curioso. Aquí estuvimos haciendo Los benasqueros (IV+), La cantosa (IV+), El bullarengue (V) y El bosquimano (V), hasta que la noche nos invitó a sacar los frontales para poder volver a la furgo.

Al día siguiente nos acercamos a La Foradada del Toscar. Con una roca fantástica, y prácticamente solos, comenzamos con Fran Zappa y The Clash, ambas de V-. Luego haríamos Cacho pan (V), y tres buenas vías más, sin nombre, de V, V+ y V+.

Casi sin darnos cuenta, entramos en la blue hour. A esta escuela definitivamente habrá que volver porque es una gozada.

Y como la Gigi es incombustible, el domingo por la mañana teníamos un rato y nos acercamos al rocódromo de Fiscal.

Se trata de un muro de hormigón con piedras naturales enganchadas con sika y un tornillo de esos de bricolaje taladrado en medio y taco stándard de plástico en el muro. Algunas presas se mueven y solamente las aguanta el más que dudoso tornillo, así que hay que ir al tanto. Aún así, hicimos las cinco vías que hay montadas y Gigi pudo practicar sus crusaitos.

Guapo finde en una zona preciosa y en fantástica compañía. Espero que en cuanto Roger se pueda calzar unos gatos, volvamos!


27 oct 2013

Ot el bruixot a la Filigrana

Pocas horas después de haber hecho la Boy-Roca a l'Elefant, Lili y un servidor debatíamos si al día siguiente haríamos deportiva o nos meteríamos en otra vía larga.

Lili era partidaria de larga, pero yo realmente había tenido una más que suficiente dosis de curtida de coco, sin embargo me puse a pensar qué podíamos hacer, especialmente en la región de Agulles de Montserrat, para que así viera esa mágica zona, que además es mi favorita.

Cuando en el 92 mi colega Miguel y yo estuvimos abriendo la Atardeceres a la Bessona Superior, había una aguja al lado a la que no le podía quitar el ojo, la Filigrana. Es la que veis justo en medio de la primera foto.

Miré las diferentes opciones para subirla. El denominador común era de un cierto grado de exposición. Tras meditar un rato vi claro que si me lo estaba pensando tanto era porque tenía unas ganas locas de ir. La vía escogida sería la Ot el bruixot (105m, V+).

El primer largo requiere comenzar totalmente concentrado. Son unos 30 metros de IV con algún pasito de IV+ pero únicamente una chapa casi llegando a la reunión. Al llegar a la reunión ví que los mosquetones que uso para las reuniones no cabían por las chapas, que son de esas como de aluminio e incluso ceden un poco cuando les aplicas un poco de presión con los dedos. Tuve que poner otros mosquetones mas finos y me quedó claro que una caida en el segundo largo no sería muy recomendable. Pero como decía aquel... en peores plazas hemos toreao y hemos salido a hombros.

Así que me lancé a por el segundo largo, que resultó ser una auténtica delicia, mantenido en su grado y con los seguros justo donde esperas que estén. Lili también disfrutó este largo de lo lindo.

Del siguiente, que pensábamos se daría ella, sólo veíamos una primera chapa bastante cerca y según las reseñas luego parece que no habría nada hasta bastante más arriba, así que continué yo. El plan era ir a buscar una reunión de la vía normal, que nos permitiría romper este largo en dos, vernos y oirnos ya que hacía algo de viento, y le daría a Lili la oportunidad de hacer el último tramo de primera.

El plan funcionó. Después de la chapa que veíamos justo en un resalte de V+, que a mi me pareció menos pero andaba bastante inspirado, subí hasta justo debajo de la barriga final, chapé un clavo con una cinta bien larga para que a Lili le bajara la cuerda más recta, y me fuí unos tres o cuatro metros hacia a la derecha, donde está la reunión de la vía normal.

En este punto Lili tenía que decidir si se metía en ese último tramo, un muro de V+ pero con algo de aleje hasta llegar a un parabolt. Como el sitio es cómodo, nos tomamos nuestro tiempo, y tras una pequeña batalla mental, Lili se decidió.

Con el estilazo que le caracteriza, fué negociando los primeros metros hasta que ya no había vuelta atrás, llegó al famoso parabolt y después a la reunión, que cabe mencionar queda algo antes de la propia cumbre.

De las agujas de Montserrat que he subido, creo que la Filigrana es la que tiene la cima mas pequeña. Sin desencordarnos, nos comimos un polvorón y luego hicimos un rápel de unos 40 metros por la cara Este de esta caprichosa aguja, que aunque está en medio de otras más grandes, tiene un carácter muy especial.

Habíamos traido la reseña de una vía en otra aguja, pero no nos costó decidir que aprovecharíamos el anticiclón y nos fuimos a la playa un rato. Yo incluso me bañé!